Características de los Textos Jurídicos y Administrativos
Los textos legales, judiciales (o procesales) y administrativos presentan un lenguaje específico: el lenguaje jurídico y administrativo. Los textos legislativos y judiciales se dan en el ámbito jurídico, mientras que los administrativos se utilizan en los diversos órganos de la Administración.
Distinción entre lo Jurídico y lo Administrativo
- Los textos administrativos suelen aplicar preceptos y normas procedentes de los textos jurídicos.
- Los textos administrativos son utilizados por un sector social más amplio y en asuntos menos técnicos; por lo tanto, son más sencillos.
Tipos de Texto
El texto instructivo es el más característico del lenguaje administrativo y jurídico, donde predomina la función conativa. Muchos de estos textos (ej: leyes, sentencias, resoluciones) emanan de una autoridad. Algunos textos son normativos (definen un concepto o establecen un medio para alcanzar un fin) y otros son prescriptivos (prohíben, obligan o permiten determinados actos). Los textos narrativos, descriptivos, explicativos y argumentativos son necesarios para hacer constar hechos, describirlos, explicarlos o argumentarlos (ej: sentencias).
Estructura de los Textos Jurídicos y Administrativos
El rasgo característico de los escritos jurídicos y administrativos es el empleo de una estructura externa que responde a un esquema prefijado. Estas estructuras, comunes y fijadas de antemano, proporcionan seguridad en la interpretación del texto y facilitan su elaboración, lectura y consulta. Se conocen como formularios: impresos con espacios en blanco que el emisor solo tiene que rellenar.
Forma Lingüística de los Textos Jurídicos y Administrativos
La lengua natural es la base de los textos jurídicos y administrativos, cuyo fin (regular las relaciones sociales) exige una lengua clara y precisa. El estilo se subordina al contenido y se caracteriza por su formalidad, objetividad y universalidad; el emisor tiene muy poca libertad de elección. El lenguaje jurídico y administrativo es un lenguaje de registro formal alto (culto), muy especializado por el contenido, la estructura, el peso de la tradición y las formas lingüísticas a través de las que se manifiesta.
Rasgos del Nivel Morfosintáctico
- Estilo nominal: El uso predominante del sustantivo da relieve al concepto. Esta característica se manifiesta en:
- La tendencia a la nominalización (ej: ‘cursar’ en lugar de ‘dar curso’).
- Las sustantivaciones (ej: ‘el demandado’, ‘lo dispuesto’).
- La supresión del artículo (ej: ‘se tramitará expediente’).
- Los adjetivos antepuestos dan lugar a formas estereotipadas (ej: ‘presunto delito’, ‘preceptivo dictamen’).
- Oraciones largas y complejas: Presencia de incisos, subordinadas, citas o referencias y aclaraciones, con el objetivo de precisar al máximo el contenido.
- Uso especial del verbo: Refleja la tendencia a la impersonalidad, lo que otorga mayor objetividad. Abundan:
- Gerundios, participios e infinitivos, en construcciones concertadas y absolutas.
- Construcciones pasivas e impersonales (3ª persona del singular).
- Formas que expresan obligación: perífrasis verbales, futuros de obligación y posibilidad, el imperativo y los verbos en los que ‘decir’ funciona como ‘hacer’.
- Los tratamientos expresan distanciamiento, con el uso del plural oficial o de la 3ª persona en lugar de la 1ª.
Rasgos del Nivel Léxico
- Se utiliza un léxico denotativo y culto en documentos jurídicos y administrativos debido a su objetivo de imparcialidad y al peso de la tradición jurídica; esta es la base del lenguaje administrativo.
- El léxico también es anacrónico (contiene palabras que ya no se emplean).
- Abundan los tecnicismos, tanto los cultismos propios (ej: ‘legítimo’) como los procedentes de la lengua común (ej: ‘vicio’, ‘escritura’).
- Muchos términos son abstractos (ej: ‘quebrantamiento’, ‘embargo’).
- Son frecuentes los arcaísmos (ej: ‘pedimento’, ‘otrosí’) y las muletillas, clichés y fórmulas de cortesía.
- También son comunes las siglas (ej: ‘DNI’).
- Los textos jurídicos son más convencionales y conservadores, y de registro culto, donde siguen vivos muchos latinismos (ej: ‘habeas corpus’).
Clases de Textos Administrativos y Jurídicos
Los textos administrativos y jurídicos se dividen en diversas clases según el emisor:
- Textos legislativos: Emanan de una autoridad con poder para legislar. Siempre son normativos o prescriptivos (obligan).
- Textos judiciales: Surgen del trabajo de los tribunales. El emisor es el ciudadano o la Administración de Justicia.
- Textos administrativos: Tienen como emisor a la Administración o al ciudadano. Son muy variados (prescriptivos, informativos, fedatarios, etc.).