La Codificación en España: Etapas y Evolución

La Codificación en España: Etapas y Evolución

La codificación en España se produjo de forma más tardía en comparación con otros países europeos. Este retraso se debió a la compleja situación jurídico-política que atravesaba el país. El proceso de codificación en España se extendió durante casi un siglo y se puede dividir en cinco etapas principales:

Etapas de la Codificación Española

1. El Trienio Liberal (1808-1823)

Durante este periodo, se planteó la necesidad de mejorar la legislación existente. Sin embargo, existían diferentes posturas sobre cómo llevar a cabo esta tarea. Algunos abogaban por recopilar y organizar las leyes dispersas, mientras que otros defendían la creación de un nuevo código adaptado a la época.

Dos ideas principales surgieron en este contexto:

  • La importancia de establecer una Constitución política antes de proceder a la codificación del derecho.
  • La necesidad de que las codificaciones tuvieran un carácter unificador, considerando todas las fuentes del derecho existentes en España.

En este sentido, las Cortes acordaron la elaboración de una codificación liberal. La Constitución de 1812 introdujo elementos novedosos, como la creación de un Código Civil, un Código Penal y un Código de Comercio únicos para toda España. Además, se eliminaron todas las jurisdicciones especiales (excepto la militar y la eclesiástica), estableciendo un único fuero para todo el territorio. Estas características estaban claramente inspiradas en la Constitución francesa.

Aunque durante el Trienio Liberal no se logró promulgar ningún código, se sentó un precedente fundamental en el texto constitucional que guiaría los procesos codificadores posteriores.

2. Segunda Etapa (1823-1843)

El acontecimiento más destacado de esta etapa fue la creación del Código de Comercio de 1829 y la Ley de Jurisdicción Mercantil de 1830. El auge del capitalismo y la influencia de la burguesía impulsaron la creación de nuevas leyes en diversos ámbitos.

Sin embargo, la inestabilidad política entre el absolutismo y el liberalismo impidió la promulgación de nuevos códigos.

3. Tercera Etapa (1843-1868)

En este periodo se creó una Comisión General de Codificación, integrada por juristas independientes del parlamento. Su objetivo era redactar los códigos Civil, Penal, Procesal y de Organización Judicial. Se pretendía que, al encomendar la redacción de todos los códigos a un mismo órgano, se lograra una mayor coherencia entre ellos.

Los primeros códigos en ser redactados fueron el Código Penal de 1848 (vigente en la actualidad, aunque con numerosas modificaciones) y la Ley de Enjuiciamiento Civil de 1855. Posteriormente, se publicó el Código Civil de 1851, que no llegó a entrar en vigor debido a la controversia generada por la supresión de los derechos forales.

4. El Sexenio Revolucionario (1868-1874)

La Constitución de 1869 introdujo principios que obligaron a reformar diversas leyes, incluyendo el Código Penal. Uno de estos principios fue la»unidad de fueros«, que eliminaba las jurisdicciones especiales, incluyendo la mercantil.

La preocupación por la organización judicial llevó a la promulgación de la»Ley Provisional para la Organización del Poder Judicial (1870)«, aún vigente, que definía la estructura y funciones de los órganos judiciales.

En este contexto, se promulgó el Código Procesal Penal de 1872, cuya redacción final se había retrasado por las circunstancias políticas. Durante esta etapa se consolidaron dos de los tres ámbitos pendientes de codificación: la organización judicial y el proceso penal. Sin embargo, no se produjeron avances en el ámbito civil.

5. La Restauración (1874-1889)

Bajo la constitución de 1876, se terminó la codificación en España, con importantes novedades en los campos que estaban sin codificar. El gran éxito de esta etapa, fue la promulgación del código civil de 1889, en la que la cuestión foral tuvo un carácter de compromiso, cediendo concesiones a favor de los territorios forales a cambio de la terminación de contiendas políticas. El código civil de 1889, pone punto final a la codificación española.

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