LA CONSTITUCION
La Constitución española de 1978 es la fuente de las fuentes, es decir, la norma que ordena las fuentes del conjunto del ordenamiento jurídico, pues determina las formas y requisitos de producción del resto del ordenamiento, fuera de las cuales una norma no podrá pasar a formar parte de aquel.
Las normas contenidas en la Constitución española se caracterizan por su eficacia directa. Esta eficacia directa de la Constitución se ha de desglosar en tres apartados:
a) El efecto derogatorio Seguir leyendo “Las normas laborales proceden” »